Luego de lograr la tan ansiada clasificación para el Mundial de Rusia 2018, Lionel Messi llegó a Barcelona para retomar las actividades con el club culé y preparar el partido del sábado próximo ante el Atlético de Madrid.
En la ciudad catalana, Lionel Messi fue recibido por su esposa, Antonela Rocuzzo y su hijo mayor, Thiago Messi, con quien se dio un cálido abrazo.
Además de la familia, varios fanáticos esperaron a la "Pulga" a la salida del aeropuerto de Barcelona para poderse sacarse fotografías e "inmortalizar" el momento.
Al "10" se lo mostró muy predispuesto a cumplir con lo pedido por el público, al igual que Thiago. El hijo del crack, de cuatro años, sorprendió con su gesto para no meterse en la foto de los fanáticos con su padre.