Familiares y amigos despidieron con profundo dolor a Emanuel Garay, el joven cadete de la Policía que falleció tras permanecer varios días en estado crítico debido al entrenamiento extremo al que fue sometido en la Escuela de Policía provincial.

El cadete de la Policía de La Rioja falleció tras sufrir un cuadro de deshidratación aguda grave y su familia reclama justicia. Otros 17 cadetes se encuentran luchando por su vida. 

Adrián, uno de sus hermanos, expresó: “Todos sabemos lo que le pasó a Emanuel, recibió una instrucción salvaje, inhumana, que le costó la vida. Nos parte el alma saber que llegó con una buena intención y ese mismo día murió su sueño".

Además, cuestionó a la fuerza policial y señaló que “esta gente no conoce el valor de la vida, nos duele la indiferencia por la vida. A mi hermano, cuando cayó, no le brindaron ni siquiera los primeros auxilios, lo abandonaron durante media hora bajo el sol y nos molesta que se intente desviar todo porque ellos sabían muy bien que le estaban causando un daño porque eso era lo que querían".

Según la autopsia, Emanuel falleció a causa de una “falla multiorgánica” a partir de un cuadro de “deshidratación aguda grave e insuficiencia renal”. Su hermano recordó que "lo sacaron de la escuela de policía en coma", que "no respiraba después de la tortura que le aplicaron". 

"Por todo eso, y por los chicos que todavía se encuentran internados y por los que sufrieron este horror, pedimos justicia. Queremos que estos malos tratos se terminen porque los responsables tienen nombre y apellido, y tienen que terminar en la cárcel”, sentenció.