La historia de Paula es escalofriante: hace un año sufrió el peor episodio de su vida y, tras reiteradas denuncias a los culpables, e incluso a los encargados de tomar el reclamo y realizarle el protocolo médico, no ha obtenido ningún tipo de respuesta justa.

Durante todo este tiempo, la joven ha tenido que vivir encerrada en su vivienda de Florencio Varela junto a sus padres, sus 3 hijos y 4 hermanos, todos menores de edad, debido a las amenazas recibidas relacionadas al caso. Ahora Paula se cansó, y exige justicia frente a los medios.

Hace alrededor de un año, la víctima se encontraba en su hogar cuando su vecina, con quien de pequeña tenía una buena relación que no se mantuvo en el tiempo, llegó para pedirle trabajo y, de paso, invitarla a su cumpleaños que se festejaría una semana después. La joven accedió, y 7 días más tarde, comenzó el horror.

Tras negarse dos veces a la invitación, Paula finalmente acudió a la celebración. Una vez allí, el primo de la agasajada le compartió un trago, en el que la víctima estima se encontraría la droga, puesto que empezó a sentirse mareada y recuerda pocos momentos después de ello.

"Recuerdo en la madrugada que me llevaron a una esquina: yo iba tambaléandome, y ahí me subieron a una camioneta blanca tipo Traffic y me llevaron a la casa de otro de los violadores, y el que la alquilaba también me abusó", relata.

"Eran más de 5 (los abusadores) porque vi sombras y siluetas, pero no sé quiénes son; los únicos que reconozco son los que tengo en la foto", añadió Paula y acto seguido enseñó las imágenes a la cámara.

Un horror sin fin

Si bien la noche había terminado, la pesadilla continuó: cuando Paula acudió a realizar la correspondiente denuncia, el efectivo a cargo de la tarea, el sargento Andrés Corvalán, falseó los datos.

"Denuncié al sargento Andrés Corvalán que me toma la denuncia, porque él pone que yo estaba alcoholizada cuando yo le digo que me habían drogado para abusarme", rememoró la joven."Por eso tuve que hacer una ampliación en la Comisaría de la Mujer", añadió. 

Por otro lado, los acusados se dieron cita en la Comisaría cuando Paula se encontraba realizando la denuncia. "No sé quién les avisó, no sé cómo llegaron ahí ni qué fueron a hacer", comentó.

Acto seguido, correspondía que le realizaran un protocolo apto para una víctima de violación, cosa que nunca sucedió. "Voy al Cuerpo Médico del Triángulo de Bernal y me atiende un médico hombre, lo que está mal porque debería haber una mujer", denunció. Además, aclaró que "me acababan de abusar, no quería que me toque un hombre".

"Lo único que hizo es revisarme visualmente", se quejó. No hubo hisopado, extracción de sangre ni test de embarazo. "Es más, el doctor llena un informe por sí solo, no me pregunta nada", agregó.

En cuanto a los culpables, todos siguen libres. Quienes dirigen la causa son el Juez del Juzgado de Garantías Nº6, Diego Agüero, y el fiscal Darío Provicionato. Existe otra causa abierta por las amenazas recibidas, en manos del fiscal Ruggeri.