Las autoridades del condado Clark, declararon un estado de emergencia sanitaria por un brote de sarampión en la ciudad de Portland, Estados Unidos, donde se han registrado al menos 23 casos confirmados y siete por diagnosticar en lo que va del año. Portland es uno de los epicentros del movimiento antivacunación en el país.

Según las autoridades por lo menos veinte de los pacientes no están vacunadas, y 18 de ellas son niños de entre uno y diez años de edad.

“Es alarmante," dijo un pediatra del Hospital de Niños de Seattle a The Washington Post.  “Cuando hay una epidemia de una enfermedad para la que tenemos una vacuna segura y efectiva, deberíamos prestar atención”.

De acuerdo a la investigación del diario, aproximadamente dos por ciento de los niños en los Estados Unidos no recibieron vacunas por razones que no tienen que ver con cuestiones médicas en el período 2017-2018, mientras que en el condado Clark ascienden al ocho por ciento. Entre estos últimos, solo el uno por ciento no recibió las vacunas por cuestiones médicas — el resto objetó alegando motivos “personales o religiosos”.

“Es algo que anticipé desde hace tiempo,” dijo Peter J. Hotez, profesor de pediatría y decano de la Escuela Nacional de Medicina Tropical. “Es realmente horrible y trágico, y totalmente prevenible. Portland es un absoluto desastre en lo que a vacunación refiere.”

El departamento de salud de la ciudad ha publicado una lista de lugares en los que estuvieron los infectados que incluye iglesias, escuelas, hospitales, tiendas e incluso un aeropuerto, para que cualquier persona con síntomas que hayan circulado por esas zonas puedan comunicarse con las autoridades y recibir asistencia médica.

Las objeciones son producto del reciente resurgimiento de un movimiento antivacunación, que fue declarado como una de las diez mayores amenazas de la humanidad por la Organización Mundial de la Salud. 

"Portland es un absoluto desastre en lo que a vacunación refiere,” dijo Peter J. Hotez, profesor de pediatría.

“El negarse a la vacunación amenaza con revertir el progreso realizado en la lucha contra las enfermedades que son controlables con vacunas,” escribió el organismo. “La vacunación previene de dos a tres millones de muerte por año y más de un millón y medio podrían ser evitadas si se mejorase la cobertura global de las vacunas.”

El reporte también confirma que los casos de sarampión han aumentado un treinta por ciento en el mundo. En nuestro país se reportaron más de una decena de casos en niños durante el año pasado y se confirmó que varios de ellos no habían recibido las vacunas.

La directora de la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología, le dijo al diario Perfil en marzo de 2018 que "desde la última campaña en 2013 a hoy ya se acumuló un cohorte de 750 mil chicos menores de cinco años susceptibles, con lo que el riesgo de brote en caso de tener un caso importado es alto."

El Ministerio de Salud y Desarrollo Social, alertado por el aumento de los infectados lanzó en octubre una campaña nacional para hace llegar a niños de entre 13 meses y cuatro años una dosis adicional de la vacuna triple viral.