Dejando atrás su habitual localía en el mítico Estadio Maracaná, Flamengo determinó la creación del nuevo estadio "Ilha do Urubú", donde ha hecho de local en la mayoría de los encuentros que lo ha llevado a disputar la final de la Copa Sudamericana, como así también ha sido su sede en los torneos locales.

Con el hecho de convertir el campo de juego en un infiero con el gran apoyo de una de las hinchadas más populares del mundo, el "Mengao" había determinado recibir a River Plate en dicho estadio para el debut de ambos equipos en la Copa Libertadores, sin embargo un imprevisto generó temor, dolor y preocupación en Río de Janeiro.

En las últimas horas un fuerte temporal azotó a la ciudad, lo que generó que en se cayeran en su totalidad dos de las columnas de iluminación del estadio, haciendo imposible su uso en los próximos encuentros. Esto no sólo generará grandes pérdidas económicas, sino que también hace cambiar la logística a pocos días de la Copa.

Con el Maracaná ocupado por una serie de recitales y la negativa de Botafogo en prestar su estadio por culpa de un festejo fuera de lugar de la estrella del Fla, Vinicuis Jr,  acusando de "llorones" al club rival, el club se ve obligado a viajar 130 km para encontrar un estadio con las condiciones adecuadas par la CONMEBOL.

En la localidad de Volta Redonda se ubica el estadio Raulino de Oliveira, también conocido como Estadio Da Cidadania, que tiene una capacidad apenas mayor de 20 mil hinchas. Si bien no se ha confirmado, las opciones son escazas y River deberá viajar más de lo previsto para el primer encuentro.