Con la sorpresa de la victoria de México ante Alemania, Corea del Sur y Suecia sabían que un triunfo los dejaba bien posicionados en el Grupo F del Mundial. Con un encuentro en el que ninguno de los dos arriesgó de más, los europeos sacaron provecho de un penal y se quedaron con un triunfo importantísimo.

El gol lo marcó el capitán Andreas Granqvist desde los 12 pasos, luego de que el árbitro recurriera al VAR por una falta clarísima, a los 20 minutos de la segunda etapa. Con esta victoria, los escandinavos alcanzan a México en la cima del Grupo F y obligan a Alemania a ganar los dos partidos que restan.

En la próxima jornada, habrá duelo de europeos y Suecia buscará dar una nueva sorpresa en Sochi, mientras que los coreanos intentarán levantar cabeza ante México, que llega dulce tras un triunfo histórico ante el vigente campeón del mundo.

El partido

La victoria de México obliga a ambos equipos a sumar para mantenerse en la pelea, sabiendo que serán los próximos rivales de Alemania. Sin embargo, con más temor a perder el cero en su arco que en marcar, Suecia y Corea del Sur esperaron los primeros minutos, sin arriesgar, para buscar los espacios y marcar.

La primera la tuvo Suecia en los pies de Marcus Berg, que tras un pase al medio y ante la mirada de los defensores asiáticos, tuvo una situación inmejorable en el borde del área, pero apareció el arquero Jo, con una de las mejores atajadas en lo que va del Mundial para impedirlo.

Arriesgando en defensa, Corea sufrió las salidas desde abajo y los escandinavos exigieron desde la pelota parada con la altura. Primero fue otra vez Berg el que tuvo la chance pero falló en la definición, y en la última de la primera mitad, Claesson conectó de cabeza pero su remate salió a centímetros del travesaño, desviado por un defensor.

Con severos errores defensivos en varios lados, el partido en el segundo tiempo se abrió y ambos tuvieron chances claras. La primera de las opciones fue para los asiáticos con un cabezazo de Woo que salió junto a un palo, y luego Jo, volvió a aparecer tras un tiro libre, para evitar la caída de su arco.

A los 20 minutos de la segunda etapa, la tecnología volvió a decir presente en el Mundial 2018. El árbitro, de mala tarea, fue salvado gracias al VAR, luego de un claro penal en el área de Corea que no fue cobrado en primera instancia, pero tras la revisión, Granqvist no desaprovechó la oportunidad y rompió el cero.

Con empuje y poco fútbol, principalmente de su estrella Heung Min Son, Corea no tuvo respuestas para generar peligro en el arco custodiado con Olsen y se quedaron con las manos vacías en su debut en el Mundial.